Libro obligatorio para emprendedores: «Nunca te Pares»

“Nos guste o no, la vida es un juego. Cualquiera que niegue esta verdad, cualquiera que simplemente se niegue a jugar, se quedará afuera. Yo no quería eso para mi.” Phil Knight

El libro del fundador de Nike (cuya traducción al español es tan cliché que no dan ganas de leer, pero no te fíes de eso) no tiene desperdicios y es de lectura obligatoria para cualquier emprendedor, no porque brinde tips y sugerencias sobre cómo emprender, sino porque es el relato crudo y desnudo de su camino en la creación de Nike.

Phil Knight comparte de manera muy fluida pero detallada la cantidad de obstáculos con los que se encontró, cómo los fue sorteando, cuántas veces pivotó, sus frustraciones, su largo camino de autoconocimiento, y los momentos que más impulso le dieron.

“El hombre que mueve una montaña comienza trasladando rocas pequeñas, decía Confucius”.

Cuenta sobre sus primeros trabajos como vendedor, como contable, y como representante de la marca japonesa de zapatillas Tiger; sobre los primeros problemas legales a los que se enfrentó, sobre cuánto tiempo le llevó pagarse un sueldo dentro de Nike, y comparte también cosas personales, como que no estaba hecho par “altas dosis de rechazo”.

Podría dar un spoiler alert, pero el final ya lo conocemos. Aquí van algunas frases y miradas de Phil Knight sobre lo que sucedía en aquellos primeros años. 

“Cuando corres en una pista o circuito oval, o por una carretera vacía, no tienes un destino cierto. El acto en sí mismo se convierte en el destino: no es sólo el hecho de que no hay una línea de llegada, sino que eres tú el que la define. (…) Todo está en cómo lo formulas en tu cabeza, en cómo te lo vendes a tí mismo”.

“En todas las religiones, parecería que nosotros mismos y nuestro ego somos el obstáculo, nuestro propio enemigo.”

“Cada dólar que no gastábamos, lo invertía directamente. Para mí, no tenía ningún sentido tener efectivo allí sentado sin hacer nada. Seguramente, hubiera sido lo más precavido, conservador y prudente. Pero el camino estaba lleno de emprendedores precavidos, conservadores y prudentes. Yo quería tener mi pie presionando fuerte sobre el acelerador.

“Si a Blue Ribbon [el nombre original de lo que hoy conocemos como Nike] le iba mal, iba a perder todo mi dinero y me disgustaría mucho. Pero también habría conseguido un aprendizaje muy valioso que podría utilizar en mi próximo negocio. Este aprendizaje quizás era un activo intangible, pero era igualmente un activo y justificaba todos los riesgos.” 

“Mi esperanza era que que cuando todo se derrumbara, si se derrumbaba, sucediera rápido, así tenía suficiente tiempo, suficientes años, para aplicar todas las lecciones aprendidas de ese fracaso. No era mucho de ponerme objetivos, pero había uno que estaba siempre presente en mi mente hasta que se convirtió en un coro interno: fracasa rápido.”

“Cuando solo ves problemas, entonces no estas viendo bien.”

“Esos que instan a los emprendedores a nunca rendirse son puros charlatanes. A veces hay que rendirse. A veces, saber cuándo desistir, cuándo probar por otro camino, es lo más inteligente. Rendirse no significa dejar de hacer. Nunca debes dejar de hacer.”

No te cuento nada más. Es un libro super fácil de leer, atrapante, que se te escurre entre las manos. Yo ya lo leí. Ahora te toca leerlo a ti. 

Es una orden. 

Consíguelo aquí.